martes, 20 de marzo de 2012

Camin de Liares

Si algo hace pequeño a la villa  de San Antolin de Ibias, no es otra cosa que la impresionante montaña que con sus 825 metros de altitud se levanta amenazante encima de ella.  Dominante y escarpada, es sin duda alguna una de las principales atracciones visuales de la zona y el asentamiento de muchos de las pequeñas aldeas que posee esta localidad en sus dominios. 


No puede el visitante llegar al concejo de Ibias y osar marchar de él sin antes subir al  "Chao d´Arqueira" a tocar, aunque sea por un minuto, uno de los cielos de Ibias. Nadie dijo que la llegada a este alto fuera fácil, pues para hacerlo habrá que sortear una carretera de serpenteantes y pequeñas dimensiones con alguna que otra curva imposible, pero da igual, cualquier esfuerzo es pequeño con tal de apreciar las impresionantes vistas del valle del río Ibias


Una vez en este punto no podremos retroceder sin antes visitar la aldea de Linares. Se sitúa a 700 metros de altitud en las cercanías de la confluencia del arroyo de Lama con el río Linares que se abre paso entre las Penas de Cuantas y el Chao de Santiso. El 23 de agosto de 2001 se inauguró en las inmediaciones de esta aldea una de las dotaciones de mayor importancia para el concejo, un Helipuerto, preparado específicamente para la extinción de incendios en Ibias.


Inicialmente este asentamiento de un puñado de casitas repartidas en dos barrios fue una braña, la braña de Linares, aunque su moderado crecimiento hizo que hoy sea un pequeño pueblo. Desde Linares se accede a las brañas de Leituelos o Loutuelos, y es punto de paso de la ruta de las pallozas de Santiso.


La entrada a la aldea está marcada por este impresionante ejemplar de arquitectura tradicional, un hórreo teitado en la modalidad de "a facha" o "a paleta", que se remonta al siglo XVIII. Seis pegollos de madera de grandes dimensiones sostienen este "simbolo" que resiste esplendoroso el paso de los años. Lo portan en titularidad los orgullosos propietarios de casa El Pinche y es sin duda una de las joyas, por eso de la exclusividad, que uno no se puede perder cuando  visita Ibias


A escasos 20 metros su hermano, de igual belleza en su día pero tocado por la mano del hombre en ese intento por conservarlo de forma económica pero echando por tierra el valor visual y arquitectónico de estas piezas únicas en territorio astur. Nos quedaremos con el consuelo de verlo así y no tirado en el suelo. 


La pequeña Capilla de los Remedios es otra muestra de la devoción que los lugareños le tienen a su aldea. Cuidada, muy cuidada, porta en su interior una talla de la Virgen de los Remedios. Aunque puede pasar desapercibida por su pequeño tamaño, merece la pena pasar a su interior y sentir la paz que se respira en el lugar de Linares o Liares, como les gusta denominarse a ellos. 


Sin duda alguna Linares es tierra de buenas y castigadoras aguas, este último término adquiere si cabe mayor importancia si recordamos que fue el lugar desde donde partió la riada que tanto daño causaría a la capital del concejo. Su fuente-lavadero, fue la gran perjudicada, pues quedó sepultada entre el lodo aquel maldito día de verano. Hoy luce una bella imagen y es otro de los sitios donde merece la pena pararse a pensar un poco. 


Una pista de unos 100 metros separa a Liares alto del bajo. Este trayecto transcurre por un camino perfectamente transitable en coche aunque es más recomendable dar el paseo andando. Unas cuatro o cinco casas forman esta parte baja, una pequeña parte de ellas habitadas o semi habitadas y las otras prácticamente en ruinas. 


Podremos destacar dos elementos bien diferenciados, el primero de ellos no es otro que las trabajadas tallas que adornan las portadas de este puñado de casas y que si por destacar, hubiera que señalar una, esta sería la de Casa del Corvo. El otro son sus fincas y la llanura de las mismas pese a estar a 700 metros de altitud y en una ladera bastante escarpada. 


Paso unas cuantas horas bajo este Sol de Ibias, que dicen que es el mejor de todo Asturias y llega el momento de coger el coche para descubrir otra joya de nuestro municipio, el pueblo de Sena, pero esto ya es otra historia y otro capítulo al que pronto daremos vida. 

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Non e Lontuelos e Loutuelos

juan dijo...

Un pueblo digno de ver.Explendido reportaje el que le has dedicado

Anónimo dijo...

Es muy guapo Ibias y todos los pueblos que hay en el es una pena que se vallan abandonando los pueblos.

Anónimo dijo...

Ibias es muy guapo y sus pueblos tambien es una pena que se queden abandonados