jueves, 21 de febrero de 2013

Victorino Alonso despide a mineros con 30 años cotizados sin indemnización ni prejubilación

Ayer se hicieron palpables en cinco folios todos los temores de una comarca. Desde Villablino a Tormaleo , pasando por Cerredo, el cartero repartió 169 cartas de despido dirigidas a otros tantos mineros, trabajadores de CMC, Coto Minero Cantábrico, propiedad de Victorino Alonso.


Fue el desencadenante de una huelga indefinida en las explotaciones mineras de Alonso, que ya había comenzado 72 horas antes con el corte de suministros de gasoil y la salida de carbón en la Campa de Tormaleo.

Una de las cartas de despido de uno de estos trabajadores, a la que tuvo acceso ALANTICA XXII, muestra en un caso sangrante hasta que punto hace daño el ERE extintivo emitido contra sus trabajadores por el Grupo Alonso. Este trabajador, con veinte años en la empresa, es despedido sin indemnización y hoy por hoy, sin un Plan de Minería aprobado, no puede acogerse a una prejubilación. Varios los trabajadores de esta empresa están en una situación similar.


En la carta, que anuncia la extinción del contrato para el día 8 de marzo se dice que Coto Minero Cantábrico no hará frente a los más 40.000 euros de indemnización a los que el trabajador tiene derecho según la última regulación de empleo del PP, como “consecuencia de la situación económica de la empresa”. A este minero, aplicando el coeficiente reductor de su sector, apenas le quedan unos días para cumplir los treinta años cotizados y por tanto acogerse a una jubilación anticipada. Pero el Plan de Minería aún no ha sido aprobada ni tampoco fijadas las prejubilaciones a cargo del Estado, con lo que su futuro está en el aire. De no resolverse la situación quedará al paro, sin indemnización y obligado a trabajar otros 15 años para recuperar sus derechos laborales.


En la extensa carta el administrador de Coto Minero esgrime los problemas derivados de la reducción de ayudas al sector planteada por el Gobierno del PP, un Plan de minería que aún no se ha firmado, para realizar una drástica reducción de plantilla. Alonso tiene retenidas las ayudas estatales porque Hunosa ha denunciado a sus empresas por la desaparición de 500.000 toneladas de los almacenes estratégicos, algo a lo que también se hace alusión en la carta de despido. Aunque se habla de merma en los beneficios, la carta no incluye ningún balance de gastos e ingresos que explique cual es la verdadera situación financiera de la empresa, una empresa podría arrojar beneficios.

Victorino Alonso parece dispuesto una vez más a utilizar el sufrimiento de sus trabajadores para ganar su pulso al Gobierno, un gobierno acosado por los casos de corrupción que tal vez no pueda permitirse otra revuelta minera. Hoy, con su protesta, los mineros de Alonso tienen prácticamente paralizada la producción de la empresa en el norte de España y podrían poner en un serio aprieto al polémico empresario leonés ya que parte de la solución a sus problemas con el Estado pasa por devolver el medio millón de toneladas de carbón extraviado.


En los piquetes hoy los ánimos están bajos, las cartas de despido son un mazazo. Se exige a la administración y a los sindicatos centrales que actúen para regularizar el sector de una vez por todas, y no continuar con tanta indecisión y agonía como viene generando. Desde la barricada un minero suspira, “ a nosotros nos harían un favor si interviniesen las empresas de Alonso”.

Fuente: Atlantica XXII
Jaime Santos

miércoles, 20 de febrero de 2013

Los mineros de Tormaleo golpean a Victorino

Mientras todos los focos informativos se centraban en la rueda de prensa convocada por la dirección de Hunosa para anunciar medidas legales contra empresas de Victorino Alonso por la desaparición de medio millón de toneladas de carbón, los mineros de Tomaleo, trabajadores de Coto Minero Cantábrico (CMC) , comenzaban una acción mucho más lesiva contra los intereses inmediatos del polémico empresario leonés


En la madrugada del pasado lunes trabajadores de la mina a cielo abierto de Tormaleo, -amenazados por un ERE que dejaría sin trabajo a 169 de sus 229 trabajadores actuales- cortaron la carretera en la Campa de Tormaleo, impidiendo el paso al subministro de gasoil que alimenta a las máquinas que explotan la mina a cielo abierto de esta localidad de Ibias (Asturias) y no permitiendo la salida de carbón. Para hoy está convocada una huelga indefinida y se prevé que los mineros de Cerredo se unan a esta protesta contra Victorino Alonso a partir de medio día. Algo está cambiando cuando estos trabajadores no se dedican a escenificar contra un gobierno sino a estrangular efectivamente la producción de su empresario.

Ningún medio, a esta hora, se ha hecho eco de esta protesta. El futuro de la minería de carbón se juega hoy en las más altas instancias. Las cartas ya están casi todas boca arriba, el órdago del ministro Soria a la industria del carbón, que le costó una de las protestas mineras más multitudinarias que se recuerdan, tenía como objetivo final desbancar a uno de los jugadores más peligroso de la mesa, el empresario Victorino Alonso. En la sombra, como ya se venía apuntando, la mismísima vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que fue Abogada del Estado en León en los inicios de su carrera y que conoce de primera mano los trapicheos del grupo empresarial que dirige Alonso.


Los mineros de Tormaleo no están dispuestos a ser una vez más moneda de cambio de un empresario al que se hoy se acusa de haber robado el fruto de su trabajo. La presunta malversación de 500.000 kilos de carbón no son, a juicio del comité de empresa de Tormaleo, una buena excusa para despedir al 70 por ciento de su plantilla y no abonar las dos últimas nóminas sobre todo en un empresa que arroja beneficios. Ahora, tras haber devastado el paisaje de Tormaleo, el de Cerredo, el de Villablino…, Alonso amenaza con irse dejando tirados a unos trabajadores que ya tienen su prestación de desempleo agotada tras varios años de parones laborales.

Los mineros de Tormaleo, en su protesta, barajan una cifra, “en 15 días que paremos las máquinas, se viene todo abajo” Y esto es literalmente. Si se paran las bombas que achican agua o las máquinas que apuntalan los enormes corrimientos de tierra de esta explotación a cielo abierto, los destrozos en dos semanas le iban a costar mucho dinero al empresario a pesar de los servicios mínimos pactados para el mantenimineto.Pero lo más delicado es el carbón que no sale; desde el grupo de Alonso ya se anunció que en un mes podrían producir (y devolver) la cantidad de carbón extraviada. Si Tormaleo y Cerredo paran indefinidamente, las cosas se podrían complicar aún más para Alonso.



Sobre los motivos del PP para acorralar a Victorino Alonso, de quien se dice, sin pruebas, que fue fundamental en la ascensión a la Moncloa de su paisano, Jose Luis Rodríguez Zapatero, estaría liquidar de un plumazo a un sector problemático y muy incentivado, y anular los chantajes de un empresario que consiguió hacerse con cerca de la mitad del combustible estratégico nacional. De paso, se pone evidencia a los sindicatos mayoritarios y al PSOE, que ante lo delicado de la situación sólo saben emitir viejas proclamas partidistas en defensa del sector. Está por ver si el cisma entre los mineros del suroccidente y los del centro de Asturias aflora en este nuevo conflicto o si se extiende la solidaridad hacia los últimos mineros en activo.

Victorino Alonso ya tiene en su contra a los ecologistas, a las compañías eléctricas y al Gobierno, sólo le quedan sus mineros y los está despidiendo.



Fuente: ATLANTICA XXII
Jaime Santos


domingo, 17 de febrero de 2013

Carbueiro, el niño mimado de mamá

Poco me conocen todos aquellos que se atreven a decir que no quiero al concejo por el mero hecho de no vivir en el. El ser de Ibias, no se compra, solo se puede presumir de ello cuando uno tiene el honor de nacer en su cuna.


Carbueiro es otro de tantos pueblos que la madre ibias ha criado en su seno y ahora que se ha hecho mayor presume dentro del concejo. No es muy grande, pero tampoco le hace falta serlo, en su única callejuela encementada van dándose paso las cinco o seis casas que lo componen y le dan forma. 


Una corta carretera perfectamente alquitranada, parte desde la carretera principal (As-211) y va ganando altura de manera serpenteante para acercarnos a la aldea de Carbueiro. A cambio de esta pequeña lejanía con el corazón del concejo, la madre Ibias que es caprichosa y equitativa con todos sus hijos, la dotó con unas impresionantes vistas del valle del río Ibias.


Dando la bienvenida en la entrada del pueblo se encuentra su longeva fuente regalando agua para beber a todo aquel que quiera apagar la sed. Junto a ella, una pequeña placita idónea para dejar el coche y más si no conocemos el lugar. 


Recorrer el pueblo de Carbueiro no es costoso ni difícil, bastara con dejarse guiar por la única callejuela que tiene para toparse con las primeras casas. En sí no hay nada que llame la atención, pero si que deberemos destacar y detenernos a disfrutar, de la perfecta piedra que aparece colocada en las fachadas de sus casas. A uno le entra la curiosidad de quien pudo ser el canteiro que con mimo hizo semejante trabajo. 


Por otro lado, felicitaremos también a los cuidadores del pueblo, por la ternura que le muestran. Todas sus casas están perfectamente cuidadas y pese a que muchas de ellas tienen pinta de ser segundas residencias. En mi estancia en él no encontré a nadie al que decírselo, así que utilizaré esta plataforma para reconocer su esfuerzo.  


La pequeña capilla dedicada a San Antonio es otro de los puntos que el visitante que decida acercarse al lugar no puede pasar por alto. Sorprende ya el hecho de que un pueblo tan pequeño cuente con capilla propia y esto sin duda alguna, da un esbozo de la unión que deben de tener los vecinos de Carbueiro. Su interior es un poco pobre en cuanto a figuras religiosas y cuya carencia está justificada, puesto que fueron quemadas durante la Guerra Civil


No lograré quedarme a gusto, si no resalto uno de los elementos que más me gustan dentro de los pueblos de Ibias y que tienen la denominación de origen asturiana. Qué sería Asturias sin sus hórreos y paneras que tanto la definen fuera de sus fronteras, al igual que de nosotros si de un plumazo, quisieran despojarnos de ellos...


En el pueblo de Carbueiro existen dándole personalidad un par de ellos. Toda una gozada contemplar sus centenarios años de historia y sus diferentes personalidades a medida que recorro los pueblos de Ibias. Sin duda alguna, privilegiados todos aquellos que cuentan con uno.


Una aldea no es tal, si no cuenta en sus entrañas con una caleya que conduce a algún prao, huerta o souto. Los de Carbueiro cuentan con una propia y a juzgar por las imágenes, perfectamente limpia y cuidada. No pude recorrerla aunque me quedé con ganas de saber su desembocadura. Sé que vosotros tenéis buena imaginación, así que darle rienda suelta e imaginaos paseando por ella en una agradable tarde de verano...


No hace falta engrandecer los pueblos de Ibias, ni pintarlos de un color que no les favorece para venderlos. No necesitan de grandes comerciales que les hagan propaganda, ni de potentes programas fotográficos que retoquen sus imperfecciones. Lo que les hace bellos es su tremenda personalidad y sencillez, un sello de identidad adictivo y cautivador que hace que el que viene a Ibias sin conocerla, cambie el concepto que tiene de ella.


Esto es lo que hace, que los propios de Ibias la llevemos permanentemente en el pensamiento y en el corazón. ¡Qué grande eres!

martes, 12 de febrero de 2013

El aforo de Muniellos a debate

Piden que se flexibilice el cupo de 20 visitantes diarios en Muniellos

La norma, que lleva vigente 30 años, está obsoleta, según «Tous pa Tous»


«Tous pa Tous», sociedad de amantes del país de Cangas del Narcea, solicita que se flexibilice el acceso de visitantes a la Reserva Natural de Muniellos, que en la actualidad sólo permite la entrada de 20 personas por día. Es un sistema que se lleva vigente 30 años. Para ello, la sociedad se ha dirigido por escrito a la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos del Principado de Asturias, María Jesús Álvarez.


«Tous pa Tous»
pretende que se encargue el estudio técnico pertinente y se entable un diálogo con los agentes sociales implicados (ayuntamientos, asociaciones, vecinos, centro de desarrollo rural, empresarios, etc.) con el fin de conocer sus opiniones y aspiraciones en relación con este asunto. De esta manera, la sociedad quiere aunar las voces, numerosas, que piden exactamente lo mismo desde hace ya tiempo: que se regularice, hacia una mayor flexibilidad, la posibilidad de acceso a Muniellos.


«Igual que el bosque, en estos últimos treinta años la sociedad y la actividad económica de Cangas del Narcea e Ibias también han cambiado mucho: la minería ha quedado reducida al mínimo, la pérdida de población no cesa año tras año; el turismo, antes inexistente, se ha convertido en un medio de vida para bastantes familias», detalla la asociación, que añade: «Existe una demanda por parte de los propietarios de casas, hoteles y apartamentos rurales, y en general por todo el sector que vive de la hostelería y del turismo, para que se permita la entrada a más personas en el monte de Muniellos».

Fuente: La Nueva España
Pepe RODRÍGUEZ



¿Sois partidarios de la ampliación del número de visitas a Muniellos?

¿Podría llegar a perderse la reputación de esta reserva con el aumento masivo de visitantes?

¿Afectaría este aumento de visitas a su conservación?

¿Es compatible la masificación con el respeto al medio ambiente?

¿Esta ampliación de las visitas podría sacrificar el título de Reserva de la Biosfera?

¿Serviría esta ampliación de visitas para dinamizar el suroccidente asturiano?

¿Veríais compatible que nacieran en los pueblos de la reserva, “chiringuitos” que vendieran la marca Muniellos?

¿Sois partidarios o detractores?