La Marquesa, el Tsobu, el Xastre y los demás

Veranito, veranito, qué largo prometías ser y qué corto te has hecho. Septiembre: mal mes, el del trabajo, el de la vuelta al cole, el del final de las vacaciones, el de la vuelta a la rutina en general.

Dejemos de lado esa depresión pos-vacacional que nos entra a todos y remontemos el trabajo con ganas, fuerzas e ilusión. Nada mejor para hacerlo que volver a darle vida a este blog como lo veníamos haciendo anteriormente, proponiendo temas como el del día de hoy. Muchos de mis compañeros ya han hecho mención a él y, por supuesto, yo no voy a ser menos; hablamos del primer encuentro bloguero: Ibias, el lejano oeste; al que tuve el gusto de acudir y del que me fuí con muy buen sabor de boca, organizado cómo no por la de sobra conocida María del Roxo.

Todo transcurrió una fría mañana del 8 de Agosto en la que unas 20 personas deciden acudir a la cita y reencontrarse así con esa gran familia internauta que formamos. Los más madrugadores el Xastre y yo, que llegamos media hora antes de lo previsto. Los más tardíos, Suso y Noe de Degaña, quienes tuvieron un contratiempo con su perro y no pudieron acudir a la hora prevista.Entramos en casa Buela, fantástico complejo rural situado en Fondos de Vega, y María del Roxo, esa chica que no quiere envejeder nunca, nos empieza a identificar con pegatinas.

Quién iba a imaginar a la señora Marquesa, tan señorial y recatada como es ella, rompiendo el protocolo, acercándose al pueblo, sin tiaras ni joyas. ¡¡Dios mío!! es humana, come tortilla de patata como el resto de españoles.
Filósofos que luego resultan ser conserjes, periodístas que luego resultan no serlo, mecánicos convertidos en guardas forestales, profesores que luego resultan ser buenos escanciadores e incluso algún ex minero que soñó en su día con la alcaldía de ibias, asi como grandes cocineras puestas en duda.

LLegó la hora de la comida y como si de un banquete señorial se tratara, allí no faltaban alimentos: torillas, empanadas, embutidos y por supuesto esos magníficos postres que hicieron repetir a más de uno. Terminada la comida llegó la hora del cafetín o cafetines, porque hubo quienes se tomaron varios, que por cierto les supieron a gloria; y las charlas, a más de uno se nos pasó el tiempo hablando o soñando con grandes proyectos para nuestros pueblos y por supuesto no faltaron las ideas para formar una asociación de blogueros; todo se andará, ¿por qué no?. El tsobu nos contó el desastre natural llevado a cabo por ese gran empresario al que todos queremos en el valle de Laciana, y por supuesto los que éramos de Tormaleo nos sentíamos identificados, demasiado diría yo, con lo que nos estuvo comentando.Las horas pasaban, y como siempre hay que tomar la última antes de irse a casa, Eminosuke propuso que nos fueramos a la suya de Degaña para disfrutar de unas sidrínas, lástima de no poder acompañarlas con ese toque de gaita que tan bien le hubiera quedado, pero me la olvidé en casa. En otra ocasión prometo llevármela.
Entre los grandes ausentes el Chapras, cuyo duelo con el Xastre le hizo poner tierra de por medio; y Mari. Lamento deciros que os perdisteis el pasar un día con todas estas personas maravillosas, consideradas injustamente como frikis o patéticos, como ya me han calificado a mí, pero que día a día luchan por que sus raíces no mueran. Personas cercanas, agradables, visionarias y sobre todo luchadoras. No hay que olvidarse que realizan un trabajo desinteresado para dar a conocer estos lugares mágicos, pero desgraciadamente olvidados.
No dudéis en verme en los próximos encuentros blogueros. No me pienso perder ni uno, dentro de cada uno de vosotros hay algo especial, esa inquietud que no os permite quedaros impasibles ante las dificultades, sacáis ese espíritu guerrero que os permite no rendiros nunca.
Magnifico día amigos, inolvidable para todos y muy valorado por mí. Seguid día a día impresionándonos con vuestros relatos y sentíos orgullosos de lo que hacéis. Hoy todos vosotros sois protagonistas de este reportaje que seguramente no vería la luz sin iniciativas como las de esta mujer, que tiene revolucionado a medio mundo con sus historias.

¿Para cuándo el segundo encuentro?